Por Alí Fernández
“El Señor Tlacuache”
M.D.I.
Hoy por hoy, no me interesa en lo absoluto que te importe o no a lo que me dedico actualmente… así que aunque tengas según tú otras inquietudes intelectuales por realizar o consideres que hay otras prioridades por atender en tu formidable vida, estoy seguro que leerás mi columna porque después de todo, acéptalo de una vez por todas, también eres en el mejor de los casos, ¡un ocioso disfrazado de curioso!, así que ¡jódete!
Empiezo mi escrito informando que encabezo una imaginaria empresa que se parece más a una fantasiosa compañía de retos y que funciona mejor cuando funge de vez en cuando como una agencia desafiante de propuestas de eléctricas respuestas, si, un concepto indefinible por completo, un rompecabezas trasgresor que corroe y comprende con desconocida pero real sustancia el estilo lunático que enloquece al fanático, ofrecemos servicios con genuino talento y abracadabrante contenido de sarcástica comprensión conceptual, mas allá de lo que nosotros mismos confesamos saber, está clarísimo, poseemos una extraña combinación que enlaza con gran tesón distintas características inconexas pero al mismo tiempo indisimulables, somos poderosos y frágiles, inventores, creadores y destructores, magos prestidigitadores, ciegos clarividentes y hasta cuando la ocasión lo requiere, ¡pitonisos! (especialmente los domingos) hacemos acertijos dentro de laberintos y contamos con dadores de besos diversos varios, bebemos del dulce trinitrotolueno y de la amarga dilucides del elixir del amor, tenemos la lengua de fuego y el verso destierro y llevamos clavada la espada del guerrero del futbol “Ali el Vengador”, continuamente invitamos a que nos inviten a cruzar por escalera de espiral del oscuro tobogán en forma de espiral de las humeantes y burbujeantes arenas movedizas del presente, justo ahí donde se encuentran el amoniaco y la oveja cuando se escapan de “ El Museo de las Ideas”.
¿Si te preguntan dónde está Ali? ¡Diles que dentro del M.D.I.!
Y ahora para continuar en el sin cesar de acabarla de amolar, seguimos atiborrándonos y sofocándonos entre más confusiones, brillantes acertamos al decidir incursionar desde luego sin permiso y obvio porque nadie no los pidió… en el ámbito de promotores de futbolistas, si, ahora somos todos unos expertos en el arte de vender carne humana, inmejorablemente fresca y por supuesto de la mejor calidad y volamos patrocinados por “La Madame” de la moda del bello Estado de Quintana Roo.
“Q & Q” (juventud desenfrenada), y así “All Aboard” partimos hacia el anticipo del paraíso ¡Cancún! entonando desde el camino al aeropuerto B.J. la rola de Don Gabilondo…
“Ahí viene el Tlacuache cargando un tambache de contrataciones por todas las calles de la gran ciudad…”
Antes de abordar me entretuve en el aeropuerto con un impactante caminar, una cadencia singular en una mini espectacular, soltura y gracia al andar, me le acerque inmediatamente y resulto ser una extraordinaria modelo de Torreón con rumbo a Televisa San Ángel y recordé entonces el refrán “ladrón que roba a ladrón, si no es de Coahuila de Torreón” y decidí un asalto poco más que convencional, le presente un plan alterno y divertido, llevarla como acompañante al insaciable e inaudito “Draft”, siempre y cuando portara un traje de baño de 3 piezas (chanclas, lentes y sombrero), fina creación de mi inspiración, simplemente ¡me dio una bofetada! así que recordando al maestro de maestros que le pongo la otra mejilla y la muy impía que se ríe y me da su teléfono (háblame cuando regreses encanto), en ese momento tuve el gran presentimiento que todo el viaje sería un éxito rotundo, ya en el avión yo en el asiento de la ventanilla y al mi lado otra mujer maravilla... en eso volteo y veo a Aguinaga y a Domínguez , venía a bordo parte del nuevo cuerpo técnico del nido Águila, me fui a platicar con los 2 Alex acerca del porvenir americanista, al llegar a Cancún salude al mayor de los mayores, a Manolo La Puente y se me ocurrió seguir tarareando delante de él la canción del “Ropavejero”.
“El señor Tlacuache compra cartas/cachivaches y para comprarlos suele pregonar para intercambiar”: ¡Porteros que vendan!
¡Defensas usados! ¡Medios estropeados! ¡Delanteros remendados..!
Cambio, Vendo y Compro por igual…”
Llego por nosotros en una mega camioneta, manejaba un güero, pensé, seguro es el segundo chofer de mi primo, el segundo más magnate de los 3 que tengo (el primero es indudablemente Adrián), en chinga al gran hotel donde se efectuara la compra venta de jugadores le indique como enérgica orden y que me contesta en español pero con tono americano, ¡chinga tu madre chilango pendejo! yo no soy el chofer de tu primo soy su cuñado, el hermano de Vicky, y de buena onda le hice el paro así que de entrada te sientas adelante conmigo cabrón agrandado y me pones pa´la gas… mañana con gusto todavía no vendo, bueno ni siquiera ofrezco aún a ningún jugador le conteste y de repente me encontraba ya pidiendo un taxi a la orilla de la carretera..
El Planeta de los Simios
Ya de frente al inmueble de las transacciones identifique a unos simios con manga corta e ideas reducidísimas, algunos de ellos eran morenos y bellu2 y otros más blancos y mas pelu2, todos sin excepción emitían sonidos guturales con actitud ignorante y muy reprobable, nada agradables celaban incivilizados la seguridad y el acceso del lugar como quien se desespera e impide con torpeza el razonamiento y el elemental sentido común de entendimiento, me identifique amablemente y me indicaron con señas de la jungla que tenían instrucciones muy precisas para no permitirme la entrada y fue ahí cuando me frustre más que Jonathan 2 Santos y enfurecí más que la tormenta Agatha y elucubré más que Agatha Christie, asiduamente pensé en quien me podía ayudar a entrar, alguien con influencias y capaz de dominar el don de la comunicación con los monos, así que empecé por mis súper amigos y que le marco primero al inteligente símbolo de sexualidad y amor, la autoridad máxima de “Los Pumas” ¡Mario Trejo!,y él me dijo: “Ali a pesar de que vengo a trabajar y no suelo involucrarme con el mundo de los primates yo te voy a socorrer”, en ese instante descubrí allá afuera que no era el asunto personal sino que estos primates agarraban parejo, uno que era idéntico a “Urco” detuvo primero a Rubén Omar Romano y le exigieron identificación mientras el otro que se parecía a “Cornelius” le tomaba absurdamente una foto a escondidas, comprendí que estaba perdido cuando vi como retenían sin sentimiento al apasionado capo y cerebro del Atlante “El Príncipe Machabeli” ¡José Antonio García!, entristecido le llame a otro amigo con nombre igual pero diferente, el sorprendente amo promotor a control remoto “Pepe García” y le comente alterado, Pepe esto se escribirá en futfriends.com, adelante, me contesto mientras unas sexy´s brasileñas le untaban con los codos bronceador a ritmo de samba en un yate verde amarello que tripulaba posiblemente la sobrina de Lula, mientras yo trataba de rentar un submarino para entrar por la retaguardia tipo agente 007, si, por el hermoso mar lleno de sirenas.
Mr. Fernández, you are a Lucky man!
En eso bajo en mi auxilio el gran Ramón, un hombre activo y eficaz diciéndome, tanto el Señor Bonilla como toda la delegación de la Federación Mexicana de Futbol están sumamente complaci2 y congratula2 con su presencia Sr. Fernández, le hago de su conocimiento además que usted será nuestro invitado de honor al banquete de piernas, por favor, nacos bellacos retiren las cadenas de bronce para que este noble y acaudalado caballero de escaso cabello y desaliñadas uñas ingrese con su ínfimo porte al salón de la justicia con o sin su traje de baño, como lo desee, pero eso sí me dijo al oído otro cortes emisario, todo este majestuoso ambiente es suyo y para su esparcimiento de sano entretenimiento, pero antes que tenga la amabilidad de pagar por favor por día su “Day Pass Cancun Draft 2010” de 150 dólarucos.
Como quien pierde una estrella
Saque la tarjeta dorada y le dije al conserje mi firma vale, bríllala y por consiguiente me adelante a observar el inmenso lobby, una nave larga y preciosa, colmada de posibilidades de negociación y saturada de pensamientos impuros, le dije a uno de mis achichíncles, perdón de mis asistentes, vayan preparando el material porque este día coloco a todos los jugadores que traemos, es más, hasta meto de nuevo al futbol mexicano a Gustavo Pedro Echaniz, trame en silencio, de perdida con un poquito de labia se lo encajo en paquete junto con Jair García, Adrián Sánchez y Emiliano Corti a mi cuate Diego Ramírez flamante vicepresidente del Durango, me interrumpe el fugaz y burdo engaño una chica chiquitita con cara de japonesita, acento argentino y fragancia a perfume de gardenias de la manzana 31, según su gafete entiendo que es la gerente y que tiene un nombre ilegible en castellano, parecía que decía algo así como; “El Pecado de Oyuki”, mascaba con maestría el chicle y moviendo la zapatilla como sube y baja contra el mármol me dijo suavemente, “Seniol Felnandez, su taljeta esta declinada”, tal y como Yolanda, lagrimas risas y poco amor sentí por esta infeliz situación de melodrama, por un lado me guiñaban mis viejos conoci2, David Ángel Comizzo, “El Tuca” Ferreti, Mario García, Omar Arellano, Víctor Manuel Vucetich, “El Profe” Cruz, “El Chepo” de Torre, Tomas Boy, Memo Vázquez, Miguel Herrera, “Nacho” Ambríz y el gran “Chelis” y por si fuera poco me cruce la mirada con mi amigo Jesús Martínez y compañía de dragones que me referían a ver ¡figura! que nos traes, vamos a platicar, encant2 de la vida y yo les cantaba orgulloso:
¡Jugadores que vendan! ¡traspasos usados! ¡Medios estropeados,
Delanteros remendados!
Cambio, vendo y compro por igual!
Y por el otro costado los mismos oscuros guardias del trago amargo pasado (recuerdan los cadeneros) burlándose y exigiéndome a empellones que me retirara lo antes posible..jajaja pero eso si no contaban con que soy como gato de 3 patas que siempre cae boca abajo, soy como el sexo pagado, como el beso robado, como el evangelio de Judas, como el Concilio de Trento ,como el coito interrupto, siempre me salgo favorablemente con otra menos con la mía, soy tan veraz e hiriente como la narrativa de la novela de P.A.P.
Como quien se desangra
Lamentablemente esta idiota historia continuara…
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